Tanto por ciento.

Por lo visto sólo el 10% de los católicos españoles van a misa el domingo. Un 90% se va al centro comercial, o a varear los olivos o se queda en casa viendo automovilismo o se van a correr al parque. 

Yo pienso mucho en ese 90%. Son cristianos "no practicantes" que no necesitan misas más que cuando tienen algún acontecimiento como BBCF (Bodas, bautizos,comuniones,funerales). No sé cual ha sido su experiencia para reducir sus contactos con la Iglesia a casi encuentros en la tercera fase. Y es cierto que a veces nuestras misas son las celebraciones del sopor y las prédicas de pero que me está uste contando padre. No van a la Iglesia por que a veces todo está tan muerto y tan frío como las estatuas de los santos de escayola, lenguaje decimonónico, cantos de gato, funeral con los pies bien fríos. Pero también puede ser que que no van porque nunca entendieron su propia fe y van a los templos como al corte inglés a consumir sacramentos que quedan bonitos en el álbum de fotos.... quien sabe.

Y luego el 10% de los que van.En ese 10% tengo amigos que van a la misa como el que toma un jarabe amargo pero necesario, haciendo raíz cuadrada de la misa y el cura del pueblo para poder encontrarse con Jesús, buscando una parroquia potable donde celebrar su fe con un poquito de ternura...

Yo miro con envidia a los del Barsa o del Madrid y no digamos a los del atleti; yo que soy un ateo futbolístico, los veo fieles emocionados que llenan sus estadios, que vibran, que lloran, que sienten sus colores como si les fuese la salvación eterna en ese gol de Neymar o Cristiano Ronaldo (fijate que curioso nombre). Incluso viajan hasta tierras lejanas como los reyes magos para ver a su heroes en esa celebración cuasi mistica de ver a Iker Casillas levantado el cáliz de la victoria... Y lloran y se abrazan tanto si pierden como si ganan.

En la Iglesia celebramos algo mucho más importante que la Copa de Europa. 

Ojala todos los forofos cristianos no esforzásemos por recuperar la emoción de ser cristiano, la alegría de reunirnos y el desparrame absoluto de encontrarnos cada domingo con el ganador de todas las ligas del mundo, Jesús.

oe oeoeoe oeeeeee oeeeeeee